Maya Angelou dijo sabiamente: La esperanza y el miedo no pueden ocupar el mismo espacio al mismo tiempo. Invita a que una se quede.
Una situación común con respecto a la esperanza.
Mi sobrino de 12 años me dijo que estaba perdiendo la esperanza ante lo que ocurre en Venezuela. Me era difícil encontrar las palabras adecuadas para un adolescente, pero supuse que, si él hacía el comentario, tendría cómo entender.
Le dije entonces que para mí la esperanza no es mi reacción ante lo que ocurre sino una elección personal. En el primer caso, dependo de eventos que no controlo para sentirme bien o no. Por el contrario, cuando cultivo la esperanza como una actitud ante la vida, puedo abordar cualquier reto con más fuerza.
Por eso quise escribir este artículo, con mis recomendaciones de qué hacer si quieres avivar esa chispa que hay en tu interior y se llama esperanza.
¿Cómo fortalecer la esperanza?
1.- Elige enfocarte en lo bueno de la vida.
En el mundo existen bondad y maldad, abuso y ayuda, amor y gente que odia. Tú puedes decidir cuál de esas opciones es la que quieres para ti. También puedes elegir qué quieres ver.
En un principio podrías decir que no es posible, pero créeme, tú puedes entrenar tu mente para que se acostumbre a ver toda la bondad y el amor que existe en el mundo.
2.- Cambia tus pensamientos.
Aunque te sea difícil entenderlo, lo que ves en el mundo es un reflejo de tus pensamientos. Si eliges pensamientos de mejor calidad, podrás ver un mundo distinto. Por ejemplo, si crees que la vida es injusta, mala o una lucha, cambia eso.
Recuerda que lo que experimentas primero lo has pensado, consciente o inconscientemente. Entonces, has un trabajo de transformación personal, desmantelando el andamiaje de ideas negativas y perturbadoras.
3.- Aléjate de personas pesimistas y quejonas.
Cuando entramos en la queja y en la crítica a otros, superficialmente siento un "fresquito en el pecho". Es mi ego diciendo: yo tengo razón y el mundo es como yo digo. Pero si sientes con más profundidad, este tipo de personas hacen que tu energía disminuya.
Mantenerte repitiendo la misma conversación pesimista una y otra vez no ayuda a que alimentes tu esperanza. Así que presérvate y aléjate de quien no suma a tu vida. Si es un familiar, elige otros temas de conversación.
4.- Medita.
Hay muchos beneficios cuando meditamos. Entre ellos: una sensación de paz, profunda relajación y sentirnos más descansados. Davidji, un experto en meditación y yoga dijo sabiamente: Si rezar es hablar con Dios, meditar es escucharlo.
Requiere compromiso y dedicación meditar regularmente, pero vaya que vale el esfuerzo.
5.- Busca inspiración.
Hay miles de historias de gente que ha superado desafíos, de empresas que se han recuperado luego de una quiebra, de familias que se han sobrepuesto a una enfermedad y países que han superado serias crisis de distinta naturaleza. Cuando lees sobre esas historias, te das cuenta que si otros pudieron salir adelante, tú también puede hacerlo.
Por ejemplo, a mí me encanta la historia de Mandela y la película basada en el atleta Louis Zamperini llamada "Inquebrantable"
6.- Oye música que te alegre o te eleve.
Cuando hacemos algo que nos alegra se producen químicos en nuestro cuerpo que nos dan felicidad. Además, una música que te guste eleva tu espíritu.
Aquí te dejo una de las canciones que más me gusta, se llama La Oración y la interpretan Celine Dion y Andrea Bocelli.
https://youtu.be/srHJW94_P8Y
7.- Aléjate de los noticieros.
Desde hace muchos años veo la menor cantidad de noticias que puedo. Creo que el enfoque de estos programas es en lo negativo, en lo horrible que ocurre en el mundo. Usualmente las noticias exponen en una cantidad mínima los miles de personas que están haciendo el bien y todas las cosas maravillosas que ocurren en el mundo.
Si tomaras consciencia de tu cuerpo, puedes ver cómo reacciona o como se siente luego de un noticiero, en general hay contracción y baja tu energía. Además, puedes concluir que el mundo va en picada o sentir miedo.
8.- Conecta un espacio de la naturaleza y disfrútalo.
Caminar descalza en la hierba, sumergirse en el mar, ver los rayos del sol en la mañana o unas aves volando pueden conectarte con esa Inteligencia Infinita que ha creado este hermoso planeta.
En mi caso, cuando veo la perfección de la madre tierra, sé que, si Dios ha hecho esa maravilla con la naturaleza, también la ha hecho con nosotros. Confío entonces que todo tiene un orden y un lugar.
9.- Haz ejercicios.
Mientras estas ocupada(o) en tu actividad física, estás generando endorfinas, químicos que te dan bienestar. Además, si pones toda la atención de tu mente en tu cuerpo, no estarás repitiendo pensamientos negativos.
Tal vez no estés lista(o) para hacer una cambio drástico, pero poco a poco puedes reducir el tiempo que dedicas a esto.
Para cerrar quiero regalarte otra cita del actor Christopher Reeve: Una vez que eliges la esperanza, todo es posible."
Nota: Para artículos de la misma autora abordando este y otros temas, también puedes visitar https://carlaacebeydesanchez.com
Una situación común con respecto a la esperanza.
Mi sobrino de 12 años me dijo que estaba perdiendo la esperanza ante lo que ocurre en Venezuela. Me era difícil encontrar las palabras adecuadas para un adolescente, pero supuse que, si él hacía el comentario, tendría cómo entender.
Le dije entonces que para mí la esperanza no es mi reacción ante lo que ocurre sino una elección personal. En el primer caso, dependo de eventos que no controlo para sentirme bien o no. Por el contrario, cuando cultivo la esperanza como una actitud ante la vida, puedo abordar cualquier reto con más fuerza.
Por eso quise escribir este artículo, con mis recomendaciones de qué hacer si quieres avivar esa chispa que hay en tu interior y se llama esperanza.
¿Cómo fortalecer la esperanza?
1.- Elige enfocarte en lo bueno de la vida.
En el mundo existen bondad y maldad, abuso y ayuda, amor y gente que odia. Tú puedes decidir cuál de esas opciones es la que quieres para ti. También puedes elegir qué quieres ver.
En un principio podrías decir que no es posible, pero créeme, tú puedes entrenar tu mente para que se acostumbre a ver toda la bondad y el amor que existe en el mundo.
2.- Cambia tus pensamientos.
Aunque te sea difícil entenderlo, lo que ves en el mundo es un reflejo de tus pensamientos. Si eliges pensamientos de mejor calidad, podrás ver un mundo distinto. Por ejemplo, si crees que la vida es injusta, mala o una lucha, cambia eso.
Recuerda que lo que experimentas primero lo has pensado, consciente o inconscientemente. Entonces, has un trabajo de transformación personal, desmantelando el andamiaje de ideas negativas y perturbadoras.
3.- Aléjate de personas pesimistas y quejonas.
Cuando entramos en la queja y en la crítica a otros, superficialmente siento un "fresquito en el pecho". Es mi ego diciendo: yo tengo razón y el mundo es como yo digo. Pero si sientes con más profundidad, este tipo de personas hacen que tu energía disminuya.
Mantenerte repitiendo la misma conversación pesimista una y otra vez no ayuda a que alimentes tu esperanza. Así que presérvate y aléjate de quien no suma a tu vida. Si es un familiar, elige otros temas de conversación.
4.- Medita.
Hay muchos beneficios cuando meditamos. Entre ellos: una sensación de paz, profunda relajación y sentirnos más descansados. Davidji, un experto en meditación y yoga dijo sabiamente: Si rezar es hablar con Dios, meditar es escucharlo.
Requiere compromiso y dedicación meditar regularmente, pero vaya que vale el esfuerzo.
5.- Busca inspiración.
Hay miles de historias de gente que ha superado desafíos, de empresas que se han recuperado luego de una quiebra, de familias que se han sobrepuesto a una enfermedad y países que han superado serias crisis de distinta naturaleza. Cuando lees sobre esas historias, te das cuenta que si otros pudieron salir adelante, tú también puede hacerlo.
Por ejemplo, a mí me encanta la historia de Mandela y la película basada en el atleta Louis Zamperini llamada "Inquebrantable"
6.- Oye música que te alegre o te eleve.
Cuando hacemos algo que nos alegra se producen químicos en nuestro cuerpo que nos dan felicidad. Además, una música que te guste eleva tu espíritu.
Aquí te dejo una de las canciones que más me gusta, se llama La Oración y la interpretan Celine Dion y Andrea Bocelli.
https://youtu.be/srHJW94_P8Y
7.- Aléjate de los noticieros.
Desde hace muchos años veo la menor cantidad de noticias que puedo. Creo que el enfoque de estos programas es en lo negativo, en lo horrible que ocurre en el mundo. Usualmente las noticias exponen en una cantidad mínima los miles de personas que están haciendo el bien y todas las cosas maravillosas que ocurren en el mundo.
Si tomaras consciencia de tu cuerpo, puedes ver cómo reacciona o como se siente luego de un noticiero, en general hay contracción y baja tu energía. Además, puedes concluir que el mundo va en picada o sentir miedo.
8.- Conecta un espacio de la naturaleza y disfrútalo.
Caminar descalza en la hierba, sumergirse en el mar, ver los rayos del sol en la mañana o unas aves volando pueden conectarte con esa Inteligencia Infinita que ha creado este hermoso planeta.
En mi caso, cuando veo la perfección de la madre tierra, sé que, si Dios ha hecho esa maravilla con la naturaleza, también la ha hecho con nosotros. Confío entonces que todo tiene un orden y un lugar.
9.- Haz ejercicios.
Mientras estas ocupada(o) en tu actividad física, estás generando endorfinas, químicos que te dan bienestar. Además, si pones toda la atención de tu mente en tu cuerpo, no estarás repitiendo pensamientos negativos.
Tal vez no estés lista(o) para hacer una cambio drástico, pero poco a poco puedes reducir el tiempo que dedicas a esto.
Para cerrar quiero regalarte otra cita del actor Christopher Reeve: Una vez que eliges la esperanza, todo es posible."
Nota: Para artículos de la misma autora abordando este y otros temas, también puedes visitar https://carlaacebeydesanchez.com